China podría estar a punto de desaparecer: su final se llama LDES, y así funciona
China podría desaparecer de un mercado que hasta ahora ha dominado: su final se llama LDES. Si el imponente alcance del hidrógeno metálico logró sorprenderte, no puedes perderte lo que viene a continuación. El país asiático lidera el camino global hacia la electromovilidad, junto a Chile, Australia y Argentina, hasta ahora los mayores proveedores del mundo de litio, una materia prima esencial para la descarbonización del planeta. Actualmente, China es líder en la producción de baterías de iones de litio.
Según registra UNO TV, fabrica el 75% de las baterías de iones de litio para automóviles eléctricos y productos electrónicos a nivel mundial, consagrándose como el mayor consumidor y procesador de este elemento que aporta suministro a su creciente industria.
En una entrevista con Xinhua, al académico chileno Cristian Garcíaexpuso que China, además de litio, dispone de otra importante materia prima crucial para el progreso de la tecnología: las tierras raras, que aúnan 17 elementos naturales de propiedades magnéticas luminiscentes y electroquímicas únicas.
“Un motor con tierras raras o materiales magnéticos es más eficiente y le da una mejor posición al auto eléctrico”, observó. Sea como fuere, China parece estar presente en todas partes, aun fuera de su territorio. Las baterías de litio se han visto como sinónimo de “futuro” durante los últimos años. Sin embargo, LDES podría ser su perdición.
China se enfrenta al peor enemigo del litio: LDES
El dominio de las baterías de iones de litio en el almacenamiento de energía pronto podría verse amenaza por la aparición de un grupo de tecnologías innovadoras que buscan almacenar energía durante un gran número de horas.
La encuesta inaugural sobre costos de almacenamiento de energía de larga duración de Bloomberg NEF expuso que, aunque la mayoría de estas tecnologías todavía están en su fase inicial y su precio es algo, algunas ya han conseguido precios más bajos que los de iones de litio durante períodos más extendidos.
La necesidad de almacenamiento de energía de larga duración o LDES está incrementando conforme crece la producción de energía renovable. Este contexto incrementa la necesidad de almacenar energía durante periodos de tiempo más largos para poner una solución a la intermitencia.
El almacenamiento de energía térmica y de aire compromiso se tratan de tecnologías LDES menos costosos, con 232 dólares por kilovatio-hora y 293 dólares por kWh de gasto de capital.
En contraposición, los sistemas de iones de litio contemplaron un gasto de capital promedio de 304 dólares/kWh para sistemas de cuatro horas de duración el año pasado. LDES no abarca una denominación universal.
El Departamento de Energía de los Estados Unidos lo ha catalogado como duraciones superiores a 10 horas, al mismo tiempo que las agencias chinas advierten que son de 4 horas. BNEF habla de tecnologías que aspiran a duraciones mínimas de 6 horas.
China podría perder peso en el mercado con la aparición de LDES
Fuera de China, donde el valor de las baterías de iones de litio es más alto, numerosas tecnologías LDESimplementados ya presentan precios más asequibles que las baterías de iones de litio para brindar duraciones de almacenamiento de más de 8 horas.
En esos territorios, el aire comprimido, la innovadora hidroeléctrica por bombeo y el almacenamiento de energía términos son los que consiguen mejores resultados. En China, la mayoría de las LDES todavía presentan dificultades para competir, puesto que el país genera algunas de las baterías de iones de litio más económicas del mundo.
Las baterías de iones de litio se emplean tanto en el sector del transporte como en el de la energía, donde la escala es un factor decisivo a la hora de reducir los costos. Esto es complicado de replicar con otras tecnologías. Los avances continuos en tecnología y la experiencia permitirán una mayor viabilidad y rendimiento en opciones de almacenamiento de larga duración.